Txakoli Txomin Etxaniz Rosado

El Txakoli Txomin Etxaniz Rosado es una exquisita expresión de la tradición vinícola del País Vasco, elaborada por la reconocida bodega Txomin Etxaniz. Esta bodega, situada en el pintoresco pueblo de Getaria, es famosa por su dedicación a la producción de txakoli de alta calidad. El Txomin Etxaniz Rosado destaca por su frescura, vivacidad y un carácter único que lo hace irresistible para los amantes del vino.

Elaborado principalmente a partir de la variedad de uva Hondarrabi Beltza, el Txakoli Txomin Etxaniz Rosado refleja las características distintivas de los viñedos costeros del País Vasco. Estas uvas son cultivadas en laderas empinadas con vistas al mar Cantábrico, beneficiándose del microclima atlántico que aporta una frescura y mineralidad inigualables. La vendimia se realiza de manera manual, seleccionando cuidadosamente las uvas en su punto óptimo de maduración para garantizar la mejor calidad.

El proceso de elaboración de este txakoli rosado comienza con una maceración corta de las uvas, lo que le confiere su atractivo color rosado pálido. Posteriormente, el mosto fermenta a baja temperatura en depósitos de acero inoxidable, preservando así los aromas frescos y frutales de la uva. El resultado es un vino vibrante y refrescante, con una acidez equilibrada que aporta una sensación crujiente y agradable en boca.

A la vista, el Txakoli Txomin Etxaniz Rosado presenta un color rosa claro con reflejos brillantes. En nariz, despliega una rica gama de aromas que incluye fresas, frambuesas y un toque floral, acompañado de una sutil nota cítrica. En boca, es ligero y fresco, con una acidez bien integrada que realza sus sabores frutales y un final largo y persistente.

Este txakoli rosado es ideal para maridar con una variedad de platos, desde mariscos y pescados hasta ensaladas y aperitivos ligeros. Su frescura y vivacidad lo convierten en una opción perfecta para disfrutar en una terraza al aire libre o en una reunión con amigos. El Txakoli Txomin Etxaniz Rosado no es solo un vino, sino una auténtica expresión del terruño vasco y de la pasión de una bodega con siglos de historia, capturando en cada sorbo la esencia de Getaria.